El Principio del Fin del Sueño Europeo

Una manifestación pro-europea en Kiev el día antes del inicio de la 3.ª Cumbre de la Asociación Oriental, el 27 de Noviembre de 2013. (Foto de Evgeny Feldman / CC BY)

Para muchas personas en todo el mundo es difícil digerir que el Reino Unido vaya a abandonar la Unión Europea, pero para algunos ciudadanos de Moldavia, Georgia y Ucrania, es simplemente terrorífico. Desde hace varios años, estos países han aspirado a unirse al bloque continental, aunque ninguno ha obtenido una oferta oficial de membresía todavía. Aunque el Brexit no precipitará la desaparición de la Unión Europea a corto plazo, marca, sin duda, el principio del fin del bloque. En consecuencia, Moldavia, Ucrania y Georgia están preocupadas porque el interés de expansión de la UE en el este descenderá, lo que permitirá que crezca la influencia de Rusia en la región.

Para Ucrania, Georgia y Moldavia, los riesgos que entraña el Brexit son altos. De hecho, los políticos de los tres países han expresado su preocupación de que el referendum británico vaya a distraer a la Unión Europea de los problemas en Ucrania y Georgia  —y de la presencia militar de Rusia en la región—. A raíz de la votación, los presidentes de Ucrania y Georgia viajaron a varias ciudades de Europa, incluyendo Berlín, para reunirse con la canciller alemana, Angela Merkel, y otros funcionarios de la UE. Se planearon las reuniones, incluso antes de la votación del Brexit, para ofrecer a los líderes la oportunidad de discutir lo que la incertidumbre general en el bloque continental significaría para sus aspiraciones de unirse a el. Los funcionarios de la UE hicieron hincapié en que las repercusiones inmediatas de la consulta serían limitadas para los tres países. No obstante, dado que las negociaciones sobre la salida del Reino Unido tomarán al menos dos años, la situación política de la Unión Europea será inestable en el futuro previsible. Ahora bien, los tres países del este se están preparando para el peor de los casos, en el que la liberalización de visados, un hito importante en la obtención de la adhesión a la UE, se posponga aún más, haciendo la promesa de adhesión tan distante como lo fue siempre.

Las Preocupaciones Políticas

La liberalización de los visados no es el único problema pendiente de un hilo para Ucrania. Incluso antes del Brexit, la Unión Europea había mostrado algunos signos de aliviar las sanciones contra Rusia. El caos tras el referéndum británico hará más probable que el bloque reduzca sus restricciones contra Rusia, que se implementaron en respuesta a la participación de Rusia en el levantamiento separatistas en Crimea y el este de Ucrania. El problema es que se resolvió a principios de julio extender las sanciones más allá del fin de año, lo que producirá que los miembros de la UE estén cada vez más divididos sobre el tema. Con otro debate parlamentario de la UE sobre las sanciones previsto para octubre, Bruselas podría reducir o incluso levantar las medidas sancionadoras que están previstas que comiencen en 2017.

Georgia, por su parte, se enfrenta a importantes elecciones parlamentarias en octubre, y su gobierno teme que el Brexit vaya a influir en la postura pro-Europa de la población. Los partidos aliados de Rusia están ganando terreno en Georgia, y están utilizando la discordia en la Unión Europea como prueba de que el país debe alinearse con Moscú en lugar de Bruselas. Por otra parte, en junio, la Unión Europea ha optado por retrasar la concesión de la plena liberalización de visados que había prometido a Georgia,. Durante un reciente viaje a Tiflis, el Ministro de Exteriores Alemán, Frank-Walter Steinmeier, trató de disipar los temores del gobierno de Georgia de que la decisión es un mal augurio para la entrada del país en la Unión Europea. Aun así, muchos políticos en Georgia son escépticos con las intenciones del bloque continental.

En Moldavia, ocurre una situación similar. El primer ministro, Pavel Filip, ha dicho que el país seguirá su camino hacia la integración en la UE a pesar de los resultados del referéndum británico. Pero los políticos de la oposición, como Igor Dodon, el principal candidato presidencial y presidente del Partido de los Socialistas de la República de Moldavia, con ideología pro-Rusia, está utilizando el Brexit para afirmar que la Unión Europea se está cayendo a pedazos y que, como resultado, Moldavia debe cesar en sus esfuerzos de ganarse la afiliación.

Las Preocupaciones Militares

Las divisiones en la Unión Europea y la posibilidad de que las sanciones contra Rusia se alivien también han suscitado preocupación entre los tres países candidatos a la membresía  —sobre todo Ucrania— de que Occidente no responderá a una presencia militar rusa en su territorio. En sus intervenciones militares pasadas en estos países, Rusia frenó su agresión para mantener buenas relaciones con la Unión Europea. Pero sin una presión diplomática considerable de Occidente, Rusia puede cortarse menos en sus actividades militares en Georgia, Moldavia y Ucrania.

En general, es poco probable que los tres países vacilen en sus esfuerzos para unirse a la Unión Europea. Pero las consecuencias del Brexit plantearán dudas sobre el futuro del bloque y aumentarán la oposición a la adhesión a la UE dentro de cada país. Al mismo tiempo, las fuerzas simpatizantes con Rusia continuarán ganando fuerza en Moldavia, Georgia y, en menor medida, Ucrania. Sin embargo, así como la próxima votación sobre las sanciones rusas se acerca y mientras la disidencia sigue creciendo entre los estados de la UE, la esperanza de Georgia, Moldavia y Ucrania de unirse al bloque europeo no va a llegar a buen término.

M.A.S.H.A